Mango

Nombres comunes: Mango

Nombre científico: Mangifera indica

Clima: Cálido

Descripción de la planta: El árbol de mango crece entre 10 y 30 metros de altura con una corona redondeada. Es de hoja perenne y tiene raíces fuertes. La savia puede ser irritante para la piel. Las hojas son largas, de forma ovalada con puntas puntiagudas, y tienen un color rojo intenso cuando son jóvenes, volviéndose verde oscuro a medida que maduran. Se poliniza cruzada por insectos. El fruto es un fruto de hueso, lo que significa que tiene un hueso grande y duro y está rodeado de la fruta. Los frutos tienen una variedad de colores, tamaños y formas, y a menudo cambian de color a medida que maduran.¹

El mango es nativo del sur de Asia, desde donde se ha distribuido por todo el mundo hasta convertirse en una de las frutas más cultivadas en los trópicos.

Cultivo: Se puede realizar la multiplicación por semilla, pero las plantas resultan de inferior calidad y las originarias no conservan sus características. Para plantar la semilla debe quitársele la vaina. La mejor forma de hacer esto es cortar los bordes de la cápsula con una tijera de podar. Una vez libre la almendra, se procede a plantarla en macetas que midan unos 20 a 25 cm de profundidad y 18 a 20 cm de diámetro. La tierra debe ser ligera y hay que procurar mezclarla con turba o tierra con mucha materia orgánica. La semilla se entierra de 2,5 a 3,5 cm de profundidad. Dentro de los 20 primeros días las semillas brotarán.

El árbol es un poco difícil de injertar; los mejores resultados se dan con los injertos de aproximación o de escudete. Las semillas plantadas en junio y julio pueden ser injertadas entre noviembre y enero, y estar listas para colocar en el campo desde julio a agosto del año siguiente.

El momento más propicio para el injerto de yema es desde mediados de primavera y verano, cuando las plantas están en crecimiento activo. Cuando los árboles de semillas han alcanzado el diámetro de un lápiz pueden ser injertados, si bien es conveniente dejarlos crecer un poco más.

Las yemas para injertar deben ser tomadas de las puntas de las ramas jóvenes, pero no de las del último crecimiento. Es importante que el gajo para injertar y el patrón sean iguales o similares en tamaño y madurez de la madera. Si es posible, deben escogerse ramitas de las cuales hayan caído las hojas. En todo caso, la madera de injerto debe estar bien madura y la punta de la ramita de la cual es tomada no debe estar en crecimiento activo.

Las plantas de injerto comienzan a portar a la edad de tres a cuatro años (10-20 frutos) para dar el cultivo óptimo de 10-15 años que continúa aumentando hasta la edad de 40 años bajo buen manejo. La fruta tarda de 100 a 120 días, en términos generales, de floración a cosecha.

Se adapta a una amplia gama de suelos, siempre y cuando sean profundos y bien drenados. Se debe plantar a pleno sol. Las plantas jóvenes se riegan con frecuencia. En el caso de árboles maduros, se riega intervalos de 10 a 15 días desde el fruto hasta la madurez para mejorar el rendimiento. Sin embargo, el riego no se recomienda durante dos o tres meses antes de la floración, ya que es probable que promueva el crecimiento vegetativo a expensas de la floración.

Usos: Su fruto es comestible y se puede conservar muy bien. Es buena para la piel, estimulando el sistema inmunológico, los ojos y el corazón, y mejora la digestión, y es buena para la piel y para la diabetes. Puede ayudar a prevenir la osteoporosis y los calambres musculares. Ayuda a controlar la presión arterial y el buen funcionamiento de los riñones. La fruta puede ser ligeramente ácida.²

Plagas y enfermedades: La enfermedad de mango más grave es la antracnosis, un hongo que puede hacer que las flores se vuelvan negras y se caigan. También causa manchas negras en el tallo y la fruta pequeña y las hojas pueden volverse marrón. Para evitar este hongo, es importante separar los árboles, quitar malas hierbas, procurar un buen drenaje y evitar el monocultivo. Se puede fumigar con una mezcla de cuatro litros de agua con una cucharada de bicarbonato y 2,5 cucharadas de aceite vegetal. Se bate y se añade media cucharadita de jabón natural. Se aplica cada semana hasta la desaparición de los síntomas.³

Referencias:

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